Las zapatillas de deporte con parte superior oscura y suela clara han sido un éxito durante varias temporadas. Independientemente del modelo que elija, esta combinación funciona para casi cualquier estilo. Sin embargo, para que el calzado siempre se vea bien, requiere un cuidado adecuado. La pala es una cosa, pero ¿qué hacer con la suela blanca? ¿Cómo mantener su color único? ¡Aquí hay algunos consejos!
Medidas arriesgadas
Internet está lleno de buenos consejos sobre cómo limpiar sus zapatos, tanto la parte superior como la suela. ¿Puedes confiar en ellos? Resulta que … no necesariamente. Es posible que algunos de ellos solo sean efectivos a corto plazo: sí, eliminarán la suciedad, pero como consecuencia conducirán a la rápida destrucción del zapato.
Si desea mantener en buen estado sus zapatillas deportivas favoritas, evite limpiarlas con productos químicos, especialmente los que contienen cloro. Lo que funciona bien para baldosas o baldosas no funcionará bien para nuestra parte superior, que está en peligro de desmoronarse y amarillear. Ponga lejía y lociones limpiadoras a menudo elogiadas en el estante; en su lugar, use métodos más naturales: hechos en casa, efectivos y, lo más importante, completamente inofensivos para los zapatos.
Cuidado suave
Entonces, ¿cómo se quita la suciedad de la suela blanca? ¡También en este caso, el dicho de que lo más simple significa lo mejor! El mejor aliado en la lucha contra los rastros de barro, polvo y polvo será un paño de algodón, humedecido con una solución de agua y jabón. Agregue suficiente limpiador para crear espuma y luego aplíquelo a su zapato sucio. Frote con delicadeza, vigorosamente, pero no demasiado fuerte, para no dañar las partes de goma y mojar la parte superior. ¡A la mayoría de los zapatos no les gusta el agua! Si la suela es estrecha o adornada, es posible que se requiera un poco más de precisión.
Un cepillo con cerdas suaves es perfecto para trabajos complejos. Además, también puede utilizar una pasta de dientes suave para eliminar la suciedad rebelde. Lo mejor es ponerlo sobre un paño de algodón húmedo y frotarlo con fuerza, con movimientos circulares hasta que la suciedad desaparezca. Finalmente, limpie todo con un paño ligeramente húmedo y déjelo secar a un lado.
Para tareas especiales
A veces sucede que el uso de incluso el mejor jabón o pasta y el frotamiento más prolongado no ayuda: las manchas son como estaban. Este problema se refiere especialmente a las manchas de hierba y de sal, que son fáciles de conseguir en invierno. Como lidiar con esto? En esta situación, vale la pena centrarse en preparaciones únicas destinadas a la limpieza del calzado, por ejemplo, champú, espuma o gel. Úselos siempre de acuerdo con las recomendaciones del fabricante, y antes de usarlos en toda la superficie, aplique un poco en un lugar poco visible. ¡Es mejor comprobar el rendimiento del producto que decir adiós a tus zapatillas favoritas con pesar!
Termine el cuidado aplicando una impregnación diseñada para caucho o plástico, que protegerá el zapato en el futuro. Además, no omita el paso de “reposar” el calzado, es decir, secarlo. Evite lugares muy calientes y fuentes de calor directo, como chimeneas y radiadores. Además, absolutamente no dejes tus zapatos al sol. La luz dura provoca un amarilleo irreversible de las suelas blancas, que tanto nos gustan.